NUEVA ORLEANS.
El huracán Ida tocó tierra en Estados Unidos este domingo como una tormenta de categoría 4 extremadamente peligrosa que podría anegar gran parte de la costa de Louisiana mientras el estado lidia con una pandemia de covid-19 que ya está afectando a los hospitales.
Ida se fortaleció durante la noche, más rápido de lo que los meteorólogos habían predicho solo un día antes.
Su llegada es la prueba más seria hasta la fecha para los cientos de kilómetros de nuevos diques construidos alrededor de Nueva Orleans tras la devastación del huracán Katrina hace 16 años, que acabó con la vida de más de mil 800 personas.
El gobernador de Louisiana, John Bel Edwards, dijo que la tormenta podría ser el peor golpe directo que sufre el estado por un huracán desde la década de 1850.
El estado también está lidiando con la tercera tasa más alta del país de nuevas infecciones por covid-19, con unos 3 mil 400 nuevos casos reportados solo el viernes.
Los hospitales están tratando a unos 2 mil 450 pacientes de covid-19, dijo Edwards, y los de muchas zonas del estado ya están casi al máximo.
A primeras horas del domingo, Ida era un huracán de categoría 4 en la escala de cinco pasos Saffir-Simpson, dijo el Centro Nacional de Huracanes (CNH).
A las 1600 GMT se hallaba a unos 95 kilómetros al oeste de la desembocadura del río Mississippi y a unos 135 kilómetros al sur de Nueva Orleans, con vientos máximos sostenidos de 240 kilómetros por hora.
El CNH advirtió de marejadas ciclónicas potencialmente mortales, daños por vientos posiblemente catastróficos y lluvias torrenciales.
Las autoridades ordenaron evacuaciones generalizadas de áreas bajas y costeras, provocando atascos en las carreteras y que algunas gasolineras se quedaran sin combustible mientras residentes y turistas huían.
Las compañías de servicios públicos estaban incorporando personal y equipos adicionales para hacer frente a los apagones previstos.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que se coordinó con las empresas eléctricas y que 500 trabajadores federales de respuesta a emergencias estaban en Texas y Louisiana para responder a la tormenta.