Por Rafael Santiago
Empresario y organizaciones civiles cierran filas contra las propuestas porfiristas de los diputados locales que aferrados al hueso, quieren reelegirse por 14 años. Expresaron su temor de que los legisladores den un albazo y un día nos amanezcamos con que ya tienen aprobada su nueva ley que les permita eternizarse en el poder.
En rueda de prensa consideraron que es «inmoral» y ofensivo el querer reelegirse en automático, cuando son de los congresos más caros del país y los más improductivos del mundo. Por ejemplo, es 3 veces más caro que el de Yucatán, que tiene un presupuesto de 140-150 millones de pesos (el de aquí tiene 500 millones) y se tiene el mismo número de diputados, pero Yucatán tiene mayor población y mayor número de municipios que los que tiene Quintana Roo. Y según el observatorio Legislativo, su productividad es del 18 o 19 por ciento, desde lo que va de una iniciativa hasta convertirlo en un decreto.
Confiados en que han aprobado préstamos al gobernador y apoyado a gente cercana a él, creen que no encontrarán impedimento para intentar eternizarse en el poder. Lo curioso es que es un congreso con mayoría morenista que actúa en sentido contrario a los postulados de la 4T y a los insistentes llamados del presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador que una y otra vez remarca que está en contra de la reelección y que el poder es para servir y no para servirse.
Todos se oponen con virulencia, pero Eduardo Lorenzo Martínez Arcila, recién electo para dirigir la Junta de Gobierno y Coordinación Política (JUGOCOPO), va en su segunda reelección como diputado plurinominal (nunca ha ganado una elección) y tendría ahora la posibilidad de reelegirse por tres veces consecutivas más, lo que alargaría su mandato por 18 años. El sueldo de un diputado es superior a los cien mil pesos más todos los apoyos y canonjías que se entregan a manos llenas.
Entre los que estuvieron en la rueda de prensa, para expresar su repudio a la propuesta de modificación de la ley que les permitiría reelegirse a los diputados de Quintana Roo, se encuentran: Asociación de Legisladores de Quintana Roo, Observatorio Legislativo de Quintana Roo, Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Consejo Coordinador Empresarial de la Riviera Maya (CCERM), Consejo de Organizaciones Nacional y Estatal en Quintana Roo (CONESQROO) y La Fuerza de Minerva AC, así como líderes de la Zona Maya. Todos coinciden en que no trae ningún beneficio, no es viable para la entidad y hasta lo calificaron de inmoral.
La iniciativa en materia de reelección legislativa, de diputadas y diputados hasta por cuatro períodos consecutivos, fue turnada a comisiones el 14 de junio, después de que la Comisión Permanente, presidida por Hernán Villatoro la avalara, según dijeron, para mayor «responsabilidad y una mejor rendición de cuentas». La justificación era que se tenía que homologar con las disposiciones federales. Para el 5 de septiembre se declaró la apertura del período ordinario, por lo que las organizaciones temen un albazo.
En la conferencia de prensa de hoy, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial de la Riviera Maya, Lenin Amaro Betancourt, afirmó que «no lo vemos viable; es inmoral; es un congreso caro, de más de 400 millones de pesos, superior a lo que recibe en presupuesto municipios pobres como Felipe Carrillo Puerto, José María Morelos y Lázaro Cárdenas». Exigió que escuchen a la ciudadanía, que cumplan con lo que prometieron al principio: ser un parlamento abierto, pero no se abre ninguna mesa de debate o discusión.
Alain Ferrat, consideró que los diputados deben exponer sus motivos y fundamentos para tales propuestas, que parece que solamente copian y pegan, lo que no es válido.
Por su parte, Eduardo Galaviz Ibarra, del Observatorio Legislativo, dijo no a la ampliación del mandato constitucional, no se puede volver a rescatar y menos con la idea de que los beneficiarios sean los mismos diputados de la actual XVI Legislatura. Recordó que tres diputados ya fueron reelectos en una ocasión y si se apegan a una reforma que proponen, saldrían altamente beneficiados. Lo que deberían pensar en reformar, dijo es en bajar el presupuesto, porque ahora, por ley el presupuesto del Congreso no puede ser inferior al del año anterior.
Por parte del CONESQROO, María Elena Santiago, aseguró que su postura es «un rechazo total a esta iniciativa, porque primero que nada los diputados están para legislar para beneficio de la sociedad, no para su beneficio ni de su partido político, que es lo que ha venido haciendo en los últimos años», expresó. Quizá sin mencionarlo recordó los cientos de millones de pesos que repartió el diputado plurinominal Eduardo Lorenzo Martínez Arcila como último presidente de la Gran Comisión, para que todos los diputados de la anterior legislatura hicieran campañas millonarias con los llamados apoyos sociales. Remató: «si permitimos esto, es permitir que retroceda nuestra constitución mexicana y de ser un país democrático, vamos a pasar a un país de dictadores». También recordó que han quedado en letra muerta la cacareada participación de la sociedad civil, y que entregaron un oficio pidiendo una reunión con más de 200 organizaciones y fueron ignorados. Insistió que los que están promoviendo esta iniciativa son los plurinominales, los cuáles «ni siquiera electos por medio del voto «.