Por Rafael Santiago
Alonso Ancira se burla de Andrés Manuel López Obrador y no quiere pagar la deuda de 200 millones de dólares por el fraude que cometió junto con Pedro Joaquín Coldwell con la venta de Agronitrogenados, según consta en la causa penal 211/2019.
Se han burlado del Presidente de la República todos los delincuentes que supuestamente estaban acorralados: hace meses que no se sabe de Emilio Lozoya, Anaya se escapó de inminente aprehensión y Alonso Ancira, dueño todavía de Altos Hornos de México (AHMSA), dice que no pagará nada y no respetará los pactos previamente acordados, se menciona que ya está en los Estados Unidos y que apelará a su doble nacionalidad para no ser extraditado.
Todos estos enredos judiciales que humillan al presidente, ha costado la cabeza de su asesor jurídico, Julio Scherer Ibarra, con lo que se corta el padrinazgo que presumía Hermelinda Lezama, alias Mara, por lo que su presunto pase automático a la gubernatura se tambalea.
Pero los que más sufren con todos estos enredos judiciales son los joaquines. Sucede que el caso Agronitrogenados parecía calmarse al llegar al aceptar Ancira reparar el daño patrimonial. Pero ahora recula y en la mañanera, AMLO le pide que no se deje llevar por sus amigos políticos y sus asesores leguleyos. Y sin embargo dan por hecho que no se realizará ningún pago estos días, que eran la fecha límite. Incluso la Fiscalía ha filtrado el documento completo del acuerdo reparatorio que se firmó el mes de abril, dos meses después de que Ancira fuera trasladado detenido a México.
El este documento, incluso se especifica que el primer pago se tiene que realizar el 30 de noviembre por un monto de 50 millones de dólares, en una transferencia bancaria del Banco JP Morgan. El segundo pago sería en noviembre del siguiente año por una cantidad similar, y así sucesivamente hasta el 30 de noviembre de 2023 en la que se pagarían 112.4 millones de dólares. Se especifica que si no se cumple, el proceso se reanudará y se romperá el acuerdo.
Así que el caso resurge con toda su fuerza y Pedro Joaquín Coldwell, que parecía que podía pasar en lo oscurito tendrá que subirse a la pasarela por ser él, como titular de la Secretaría de Energía (SENER) quien presidió la reunión donde se autorizó el escandaloso fraude a favor de Ancira. A ello hay que sumarle más y más fraudes que cometieron con la reparación y posterior venta de la misma fábrica de fertilizantes.
Agro Nitrogenados no es el único pendiente de Pedro: está Fertinal; el caso de Oro Negro, una perforadora de pozos petroleros que denunció que le pedían moches para darle contratos; y el platillo fuerte, las rondas petroleras, que fueron un gran negocio y cuyo saqueo es de tal magnitud, que no son pocos los que consideran que es una traición a la patria el haber entregado el petróleo de la nación a empresas extranjeras.
Al realizar estos negocios multimillonarios, junto con Lozoya, logró la venia del entonces presidente Enrique Peña Nieto, quien le permitió imponer como gobernador de Quintana Roo, a su medio hermano Carlos Joaquín, quien se desempeñaba como subsecretario de Turismo del mismo gobierno federal. Fluyeron dinero de Odebrecht, además de la parte que les tocó en el reparto de los bienes saqueados a la nación.
A pesar de que se han puesto como alfombra ante el gobierno federal, su caso nuevamente resurge porque alguien tiene que pagar los platos rotos de todo este desfalco a la nación.